Skip to Content

Tips para cocinar sin sal y con mucho sabor

Hierbas verdes cortadas sobre tabla de madera

“La sal, el sabor de la vida”, recita la famosa frase... pero si querés reducir el consumo de sal hay muchas cosas para darle sabor a tu vida y ¡a tus comidas, claro!

Como sabemos de la mano de los expertos, el consumo excesivo de sal hace mal a la salud, pero ¿cómo hacer para no perder gustito en las comidas del día a día sin usar sal?

Por suerte, tenemos la respuesta de cómo reemplazarla con estos tips y trucos para que puedas reducir su consumo sin perder ni una pizca de sabor.

¿Qué necesitás para reemplazar la sal?

Hierbas, frescas o secas

Son súper simples de utilizar. Podés sumarlas al principio o al final de tus preparaciones y de esta manera realzar el sabor del plato sin agregar sal.

Especias

Son todas de simple acceso. Hay en el supermercado o en las dietéticas y, como las hierbas, podés agregarlas al principio o al final de tus recetas y así no sólo realzar el sabor de tus platos, sino también darle un toque diferente.

Si querés saber más sobre especias, hierbas y condimentos, te invitamos a convertirte un experto con nuestra nota: Guía fácil de condimentos imprescindibles en tu alacena.

Ralladuras

Pueden ser de cítricos como limón o naranja, o también de jengibre. Los aceites esenciales que poseen estos vegetales darán gran sabor a tus platos.

Cebolla y ajo

Esta base de ajo y cebolla salteada realza cualquier plato. ¿Suena genial no?

Grillar, saltear o asar a la parrilla

Todo lo que dé color dorado a la comida (carne o verdura) realza el sabor del plato. Un recurso simple pero efectivo y que puede darle un toque genial y muy diferente a tu receta.

Chiles picantes

Sean frescos o secos pueden darles un perfil diferente a tus comidas sumando mucho más sabor y ¡un toque de picante no está nada mal!

Caldos granulados reducido en sodio

Este gran aliado no sólo potencia el sabor, sino que suma todo el perfil de vegetales.

Vinagres o aceites

Nunca está de más agregar un chorrito de un buen vinagre o aceite de oliva, canola, etc, para realzar el sabor.

Sales dietéticas

Vas a descubrir que hay sal de ajo, de apio, y otras que pueden darte una mano también a realzar el sabor de tus preparaciones.

Recordá que el sabor de la sal es un tema de hábito. Si comenzás a reducir su uso te acostumbrarás a sabores mucho más naturales y sanos.

Animate a probar una receta con mucha sazón y empezá a darle un gusto más diverso ¡y hasta exótico! a tus recetas.

Próximo artículo

cebolla trozada junto a cuchillo de cocina

Los mejores trucos para cortar cebolla sin llorar