Cheesecake clásico

Hoy nos levantamos antojados de comer una buena porción de torta. ¿Por qué? No hay por qué, y no lo necesitamos. ¡Nos lo ME-RE-CE-MOS!

Así que vamos a preparar juntos, en este paso a paso súper sencillo, un clásico de clásicos: el cheesecake. Noble, riquísimo, fresquito, una explosión de sabor en cada bocado. Esta torta no falla, ¿o conocen a alguien al que NO le guste el cheesecake?

Un poco de data. ¿Quién inventó el cheesecake? ¿Con qué queso se hace el cheescake? ¿Cómo se prepara?

El glorioso cheesecake (que literalmente se traduce a torta o tarta de queso) es un postre popularizado a partir del siglo XX, clásicamente hecho a base de ricota, crema, huevos y suele coronarse con alguna salsa o mermelada de frambuesa, arándanos o frutos rojos.

Popular en la Antigua Grecia, incluso antes de la adopción Romana de esta receta con la conquista de Grecia. De hecho, el registro de la mención escrita más antigua fue hecha por el médico Griego Aegimo, que escribió un libro sobre el arte de hacer queso. Simplemente fantástico.

Para esta receta definitiva del clásico cheesecake vamos a usar queso crema como base, pero podés usar ricota o queso mascarpone (ambas opciones son deliciosas). Además, vamos a preparar esta torta desde cero, es decir, desde la base, al relleno y hasta la salsita deliciosa para coronarla como se debe.

Sin mucho más preámbulo, veamos los ingredientes que vas a necesitar y pongámonos a preparar el cheescake más rico del mundo.