Sopas
Si hay un plato que es versátil, ¡ese es la sopa! Se puede comer sola o acompañada, de entrada, o como plato principal. Calentita, para esos días de frío en que necesitás algo que te reconforte y te llene de energías. Pero también la podés probar fría, como el clásico gazpacho. Y es que la sopa te permite incorporar en un solo plato una gran cantidad de ingredientes: carne, pastas, verduras, legumbres. ¡Vos elegís! Pero no te olvides de ponerle el ingrediente más importante: mucho, pero mucho amor. ¡Vamos!